Si tu problema, (como el de medio mundo), es tener que impermeabilizar una pared de tu casa, pretendo contarte los secretos básicos para ahorrarte mucho dinero en reparaciones…, y también muchos dolores de cabeza.
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El Mejor Impermeabilizante para Paredes: Hacerlo Bien desde el Inicio
Sin lugar a dudas, el sistema más efectivo para quitar la humedad de las paredes… es tratar que la humedad NUNCA INGRESE!!
Es demasiado obvio, pero estamos tan acostumbrados a buscar productos mágicos o técnicas salvadoras para saber cómo solucionar humedad en paredes. Lamentablemente tratamos de hacerlo una vez que ésta ya ha aparecido, olvidándonos de pensar en hacer las cosas bien para que esto NUNCA ocurra.
La lucha por sacar la humedad de las paredes no deja de ser un problema siempre vigente, que afecta a TODA la gente, TODOS los días. Evidentemente, en algo nos estamos equivocando, y ese algo es muy grande.
Éstos son los casos en que debemos pensar seriamente en la forma en que estamos tratando de impermeabilizar las paredes de nuestras casas. Es seguro que allí está la raíz de todos los males. Sin dudas es la CLAVE de esta cuestión
➡️ Cómo Impermeabilizar una Pared Exterior: La fórmula Universal
Dentro de la construcción tradicional, la más habitual de las técnicas para saber cómo impermeabilizar paredes es recurrir al uso de revoques impermeables o morteros hidrófugos.
¿Para qué sirve un mortero de cemento hidrófugo?
Al revocar una pared exterior, se aplican directamente sobre el ladrillo y generan una primera barrera protectora para evitar que la humedad ingrese a la casa.
Para todo aquel que se dedique a la construcción (y para muchos otros que no tienen que ver con ella), es ampliamente conocida la fórmula o dosaje para preparar un cemento antihumedad. Pero por las dudas la recordamos la mezcla para revoque impermeable:
Azotado impermeable = 1 parte de cemento + 3 partes de arena
Estos elementos mezclados en seco se hidratan en agua que ya lleva diluida el aditivo impermeabilizante para concreto (Sika, Ceresita, etc.). De esta manera se puede preparar una mezcla impermeabilizante con la consistencia adecuada para ser trabajada y extendida fácilmente sobre los muros.
Esto es algo así como la fórmula universal, que «en teoría», permite saber cómo solucionar la humedad en paredes de forma efectiva, duradera y segura.
Me pregunto entonces: si explicar una cosa SUMAMENTE SIMPLE lleva tan poco tiempo y es tan sencillo de entender;
¿Por qué el tratar de eliminar humedad en paredes sigue siendo un problema tan corriente?
Adelanto mi primera conclusión: 90% error humano (si, 90%) y 10% error «no humano». Y voy a intentar explicarlo.
Errores al aplicar el Mortero Hidrófugo
Resulta difícil aceptar que algo formulado especialmente para impermeabilizar paredes termine tan fácilmente «haciendo agua», (literalmente hablando).
Con pesar tengo que admitir que no muchos obreros de la construcción saben cómo hacer mezcla de cemento para paredes, o más exactamente, a aplicarla correctamente. Además, en muchas circunstancias, quienes debemos supervisarlo no estamos bien preparados técnicamente para conocer los secretos sobre como impermeabilizar una pared exterior correctamente.
Por eso vamos a tratar de analizar los errores más comunes a la hora de hacer un azotado impermeable. Las soluciones para la humedad comienzan corrigiendo estas malas prácticas.
1) Falla en revoque Impermeable: Mala proporción de la mezcla hidrófuga
Uno de los primeros errores al pretender impermeabilizar paredes es una mala utilización de la proporción en la elaboración del impermeabilizante.
Cuando hablamos de 1 cemento : 3 arena, nos estamos refiriendo a volúmenes (baldes, latas, tarros, etc.) y no a pesos (kilogramos, etc.).
Si para elaborar la mezcla impermeable utilizamos, por ejemplo, «baldes de construcción», usemos entonces sólo «baldes de construcción». En otras palabras, no utilicemos otros elementos y menos aún «el ojo de buen cubero» como unidad de medida. Para algo están las fórmulas.
Podremos usar 2:6, 3:9, o 4:12, pero la proporción seguirá siendo la misma de base: 1 volumen de cemento + 3 volúmenes de arena.
Si no se pone esmero en respetar algo tan básico, no pensemos siquiera que quitar la humedad de las paredes sea tan siquiera posible.
2) Segundo problema en el Cemento Impermeable: Mal uso (o falta) del Hidrófugo
Por si quedara alguna duda, tratemos de aclarar algo:
¿Qué es el hidrófugo y para qué sirve?
Usualmente se los conoce por sus nombres comerciales. Aún hoy mucha gente pregunta ¿para qué sirve el Tacurú, el Sika o la Ceresita en albañilería? Un claro ejemplo en el que la marca supera al nombre del producto. Pero mejor llamemos las cosas por su nombre.
El hidrófugo es un aditivo impermeabilizante para concreto, que incorporado en el agua, permite obturar los poros del mortero de cemento. Así se logra mejorar su capacidad antihumedad. Sin dudas, una de las formas mas simples de prevenir una pared con humedad.
Como en el caso anterior, también existe una proporción básica que debe respetarse para mezclarlo con el agua. ¿Cómo se usa el hidrófugo?
El agua así preparada se utiliza para hidratar la mezcla de cemento y arena (1:3) como primer paso para revocar una pared. Si esta proporción (1:10) no se respeta, obviamente estaremos a las puertas de futuros problemas de humedad en las paredes. Y ya que hablamos de proporciones no respetadas te cuento una breve historia.
Luego de una temporada de lluvias larga y persistente, donde los problemas de filtraciones de humedad estuvieron a la orden del día, se me ocurrió verificar cómo se estaba haciendo la mezcla de cemento impermeable dentro de la obra.
Con sorpresa (o no tanto) pude comprobar dos cosas:
a) Que el hidrófugo se agregaba dentro de la mezcladora u hormigonera, al final de todo!!, es decir, una vez que el resto de los componentes impermeabilizantes ya estaban mezclándose. Algo así como «a ojo«, sin ninguna clase de control sobre CUÁNTA AGUA HABÍAN USADO!!
b) Que en el mejor de los casos, la unidad de medida más utilizada para calcular 1litro de hidrófugo era una lata de conserva de durazno. Una vez medida es fácil comprobar que su capacidad real es 700 cm3. La realidad entonces, es que se le estaba agregando solo un 70%!! del aditivo hidrófugo que era necesario.
No quiere decir esto que el cemento impermeabilizante no funcionara, pero sí que su eficacia para eliminar la humedad en paredes dista ENORMEMENTE de ser la ideal.
3) Tercer Error de la Aislación Hidrófuga: El espesor del Azotado Hidrófugo
Para que luego no haya que quitar la humedad de las paredes, el revoque impermeable debe tener un espesor mínimo de entre 5 a 8mm. Un error común al extender la mezcla aislante, es presionar excesivamente hasta hacerle perder espesor. Por lo tanto su capacidad para impermeabilizar paredes DESAPARECE.
Por eso es tan importante asegurarse de conservar espesores mínimos si pretendemos evitar futuros problemas de humedad.
4) Cuarto error: Cómo Aplicar Impermeabilizante en Paredes correctamente
¿Cómo revocar una pared para aislarla de la humedad?
Es demasiado habitual que se mezquine mojar bien las paredes que se van a revocar, por pereza, por costumbre repetida o por desconocimiento.
Cuando se hidrata la mezcla de cemento y arena (1:3), el agua es el principal responsable de favorecer el fraguado. Llamamos así a la reacción química que se produce para endurecer el mortero hidrófugo y darle una adecuado poder impermeabilizante para pared.
El agua de la mezcla hidrófuga tiene que estar presente por un período prolongado. Si desaparece antes de tiempo la mezcla «se quema», es decir que su poder como impermeabilizante para paredes termina siendo nulo.
Si los ladrillos del muro no se mojan adecuadamente antes de revocarlos, éstos actúan como «esponjas» absorbiendo el agua de la mezcla impermeable. Al hacerlo cortan la reacción química que produce su endurecimiento.
Un simple cacharro de lata usado para salpicar de agua un muro, es un inútil intento por hidratar los ladrillos. No hay que perder el tiempo con un sistema que NO SIRVE PARA NADA.
Si el muro en cuestión no se moja correctamente, en tiempo y cantidad de agua, el revoque hidrófugo «morirá» antes de tiempo. Así sólo nos quedará buscar soluciones para eliminar la humedad en las paredes, una vez que ésta ya sea una realidad.
5) Quinto error: El mal «curado» del Mortero de Cemento
Como mencionamos:
La presencia sostenida del agua es fundamental para producir la reacción química que genera el fraguado (endurecimiento) de los morteros impermeables. Si éstos se secan tempranamente pierden su efecto como aislante de la humedad.
Si el mortero (revoque) impermeable no se cubre inmediatamente con la próxima capa de revoque grueso (no mas de 1/2 hora después), se corre el riesgo que se seque por acción del viento o la exposición al sol directo. De allí que sea tan importante, no sólo cubrirlo con otra capa de mortero de cemento, sino también proteger a este revoque grueso con un buen «curado».
¿Qué significa «curar» un revoque hidrófugo?
El «curado» consiste, ni más ni menos que en mantener hidratadas (húmedas) las paredes recién revocadas. Para ello se deberá humedecerlas 3 veces al día, al menos durante 3 a 4 días.
Soy consciente que más de uno estará sonriendo. Créanme que esta práctica es una de las formas más efectivas de impermeabilizar paredes exteriores desde el mismo inicio de la obra.
Un buen «curado» evitará que el revoque grueso se microfisure al secarse (grietas de contracción). Puede que esas fisuras se transformen en una vía de acceso para la humedad que viene desde el exterior.
Aquí un vídeo para entender en qué consiste el curado de los revoques.
6) Sexto problema al Hacer Cemento Hidrófugo: «El componente técnico»
Dentro de esta galería de errores de impermeabilización, había mencionado un 10% de responsabilidad «no humana» en la aparición de humedad en paredes. Y esto es algo que yo llamaría «el componente técnico».
A esta altura ya sabemos de la importancia del cemento en la elaboración del revoque impermeabilizante para paredes. Pero,
¿Podemos conseguir en el mercado cemento puro?
Al menos, en esta parte del mundo, las bolsas de cemento de comercialización más habitual, llevan impresa en una de sus caras una inscripción de este tipo:
No quiero entrar en tecnicismos aburridos, por eso te lo explico simplemente. El filler calcáreo y la escoria son una mezcla de componentes minerales formada por las impurezas, que flotan en los hornos donde se fabrica el acero.
La idea es agregar estos minerales molidos a la bolsa de cemento (que ya no será «100% cemento») para mejorar su trabajabilidad. Hasta aquí todo bien. Lo que se omite mencionar (vaya casualidad) es algunos detalles importantes.
Muchos estudios, inclusive de las mismas empresas que los fabrican, confirman que estos tipos de cemento (sito textualmente):
… tienden a aumentar el riesgo de fisuración por retracción plástica
Lo que pasado en limpio significa: que son más propensos a generar grietas (futura humedad!!) durante su proceso de secado. Esta tendencia se minimiza «…con buenas prácticas de protección y curado», es decir, haciendo:
TODO lo que hasta ahora estuvimos recomendando!! (ver las 5 recomendaciones anteriores).
Mortero Antihumedad: Conclusiones finales
Digamos, a manera de resumen, que el mejor tratamiento para humedad en paredes es tratar de evitar estos errores a la hora de impermeabilizar los muros:
- Mala proporción de la mezcla de cemento y arena (1:3)
- Mal uso (o falta) del hidrófugo o aditivo impermeabilizante para pared
- Reducido espesor del revoque impermeable
- Mal hidratado (mojado) de las paredes a revocar
- Mal «curado» de los revoques hidrófugos
- Uso de cementos con tendencia a la formación de grietas
En el proceso de saber cómo eliminar la humedad en las paredes, las técnicas tienen que ver FUNDAMENTALMENTE con cambios de hábito en la forma que tradicionalmente se hacen las cosas.
Muchas veces las raíces del problema tienen que ver con una mala formación técnica de quienes tienen a cargo la ejecución de una obra. No se llega a ser un buen albañil o un obrero especializado más que en base a la experiencia, y eso sólo si se ha tenido la suerte de tener un buen maestro.
Quienes proyectamos y ejercemos la Dirección de Obra, sin estar a cargo laboralmente del grupo de trabajo que la ejecuta, sólo podemos supervisar parcialmente lo que se construye ya que no estamos la jornada completa dentro de la obra. Esto no nos exime de responsabilidades, pero si acota la posibilidad de «formar» al obrero de la construcción.
En la medida que entendamos por dónde pasan los errores habituales, estaremos en mejores condiciones de controlar los orígenes de los problemas de humedad. Triste es llegar al momento de pararnos delante de una mancha…sin tener la más mínima idea de qué la ha originado!!
Aspiro a que esto de revisar como revocar paredes en nuestras casas nos evite tener que preocuparnos, sabiendo que hicimos todo lo posible, desde el inicio, para que esto NO OCURRA.
Te invito a compartir tus experiencias para sumar soluciones.
En este vídeo podrás ver un complemento de este tema y aquí podrás encontrar las mejores 3 formas de sacar la humedad de las paredes de forma DE-FI-NI-TI-VA!!
Arq. Marcelo Seia